¿Tienes un cuadro valioso y lo quieres vender? Lo mejor es hacerlo en subasta. Las casas de subasta cuentan con expertos que pueden tasar tus obras, además de valorar si son susceptibles de subastar.
Por lo general, cuando un coleccionista o particular quiere vender cuadros o cualquier objeto de arte, suele ponerse en contacto con una casa de subastas, o con agentes especializados en dichos objetos.
La casa de subastas hará una valoración de la obra, sean cuadros, esculturas, etc. Usualmente es la casa la que determina qué objetos pueden subastarse. Hay algunas que se dedican solo a cuadros, o a esculturas, pero por lo general aceptan una gran diversidad de objetos, siempre y cuando sean valiosos.
Esta variedad puede incluir arte clásico y antiguo, pintura contemporánea, arte oriental, objetos vintage, libros, joyas, porcelanas y cerámicas antiguas y modernas, colecciones especiales, coches, y un largo etcétera.
Cosas que debes saber antes de vender tus cuadros en subasta
Para vender tus cuadros, la casa de subastas y tú llegarán a un acuerdo en donde se establecerá el precio de salida así como las condiciones de corretaje y gastos de gestión. Reclama siempre tu recibo de depósito.
Los cuadros suelen estar en exposición unos días antes de la subasta, ya sea presencial u online, y se te informará sobre la fecha exacta y el número de lote de tus objetos. Si no asistes a la subasta, la casa te enviará vía correo electrónico o postal los resultados de la misma.
Es mucho más cómodo vender de esta manera aquellos objetos artísticos que consideres más valiosos. Estas casas cuentan con tasadores y vendedores profesionales que te asesorarán en todas las fases de la exposición y venta.
Una vez deducidos los gastos del acuerdo, la casa de subastas te pagará el resultado de la transacción, y expedirá un informe con todos los detalles.